El desafío de planificar con incertidumbre nacional

El legislador de Forja, Federico Sciurano, detalló los complejos engranajes del presupuesto provincial, cuya formulación se ve obstaculizada por la dependencia de decisiones previas del gobierno nacional. Explicó que la obligación de presentar el proyecto local antes que el nacional genera un problema fundamental para proyectar los ingresos por coparticipación.

Sciurano desmitificó la composición del gasto, afirmando que «en gastos corrientes se proyectan el 60%, el 58,98% destinado a servicios sociales y el 29% está destinado a la administración» por lo que el gasto en salarios representa «menos del 50%» del total. Además, identificó una partida crítica: «La tercera partida que tiene el presupuesto del año que viene, son 38.500 millones es el subsidio al gas. Es un impacto evidentemente muy grande», cuya evolución ha sido exponencial.

Respecto a la deuda en dólares, destacó la gestión para «descomprimir un poco la economía» mediante su renegociación, lo que evitó un año «realmente muy duro para la provincia». Valoró positivamente la reautorización de las letras de Tesorería, definiéndolas como «una herramienta financiera muy importante» para manejar la liquidez de corto plazo y lograr «cierto equilibrio emocional en el desarrollo de lo que es la cotidianidad de llevar el gobierno adelante».