Ushuaia fortalece su proyección antártica tras el congreso

El primer Congreso Antártico celebrado en Ushuaia congregó a más de mil asistentes y estableció una agenda clara para impulsar a la ciudad como el puerto de entrada fundamental al continente blanco, combinando divulgación histórica con un análisis estratégico de las oportunidades logísticas aún desaprovechadas.

Fernando Chiesa, de la Fundación Finnova, calificó el evento como un éxito colaborativo y enfatizó su propósito central: “El objetivo de este Congreso es fortalecer el rol de Ushuaia como puerta de entrada a la Antártida”. Subrayó, además, la necesidad de un cambio tangible: “Buscamos transformar la realidad existente para que estemos más cerca de competir con Punta Arenas”, advirtiendo sobre la ventaja logística que ha capitalizado Chile.

El diagnóstico presentado fue contundente. Chiesa señaló la paradoja de que, pese a liderar el turismo antártico, la ciudad está ausente en la provisión logística para las bases científicas: “Nos estamos perdiendo toda una dimensión que tiene el potencial de transformar nuestra ciudad”. Sobre el impacto económico de capturar ese mercado, fue enfático: “El potencial es tanto o más que el turismo antártico”. Tras una polémica menor por un error cartográfico en una presentación, el foco se reafirmó en la acción soberana, proyectando como próximo objetivo convertir a Ushuaia en sede de la Reunión de Administradores de Programas Antárticos Latinoamericanos (RAPAL) en 2026.